
Diario de minería, petróleo y campo.
Con foco en fortalecer su soberanía energética, Cuba avanza en un nuevo proyecto de exploración de hidrocarburos junto a China. El objetivo es hallar nuevos yacimientos y mejorar el abastecimiento del Sistema Eléctrico Nacional.
Exploración estratégica y cooperación energética
El Gobierno cubano, en alianza con China, ha iniciado nuevas campañas de exploración de petróleo y gas en diversas zonas de la isla, con el objetivo de descubrir yacimientos que permitan revitalizar la producción nacional de hidrocarburos y garantizar un suministro energético más estable y soberano.
El anuncio fue realizado este martes 4 de junio por medios locales, en un reportaje que destacó la relevancia del proyecto en el marco del Plan de Recuperación del Sistema Eléctrico Nacional impulsado por el Gobierno cubano.
“Mientras más petróleo encontremos, más posibilidades hay de extraerlo y ponerlo en función de la economía y el desarrollo del país”, explicó el Dr. C. Enrique Castellanos Avella, director de Geología del Ministerio de Energía y Minas de Cuba.
En busca de autonomía energética
La estrategia busca evitar una caída en la producción de los yacimientos existentes y fortalecer la resiliencia del sistema energético nacional frente a las limitaciones externas, en especial las derivadas del embargo y las sanciones internacionales.
La exploración se da en un contexto de estrecha cooperación con China, que ya participa en otros sectores estratégicos en la isla, como la biofarmacia, la salud, las telecomunicaciones y la transformación digital.
China y Cuba: energía para un nuevo orden internacional
La colaboración energética forma parte de un marco político más amplio. Según el gobierno cubano, se trata de una respuesta estratégica a los desafíos impuestos por políticas unilaterales, con la intención de fortalecer el socialismo y promover un orden internacional más justo y multipolar.
Desde Beijing, la cooperación con La Habana se presenta como una asociación integral de desarrollo, que combina inversiones, transferencia de tecnología y asistencia técnica. En el caso de la energía, esto incluye tanto exploración convencional como perspectivas futuras en energías renovables.
Próximos pasos
Aunque no se han detallado las áreas geográficas concretas ni las tecnologías aplicadas en esta nueva fase de exploración, el gobierno cubano ya ha trabajado con empresas chinas en zonas costeras y offshore en el pasado.
Los avances en esta iniciativa podrían traducirse en nuevos acuerdos de producción compartida, inversiones en infraestructura energética y, a mediano plazo, una mayor estabilidad en la generación eléctrica del país, actualmente afectada por cortes recurrentes.