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El gas natural licuado (GNL) es un recurso importante que puede aportar importantes beneficios económicos y medioambientales. He aquí algunas razones.
El gas natural licuado (GNL) es un tema que ha venido acaparando gran atención en los últimos años. A medida que el mundo busca fuentes de energía más limpias y eficientes, resulta crucial entender qué es el GNL y cómo se obtiene.
En este artículo, nos adentraremos en los fundamentos del GNL, su importancia económica y sus implicaciones medioambientales.
Qué es el GNL
El GNL, en términos sencillos, se refiere al gas natural que ha sido enfriado hasta un estado líquido mediante un proceso denominado licuefacción.
Este proceso de enfriamiento reduce el volumen del gas natural unas 600 veces, lo que facilita y abarata su transporte y almacenamiento. La licuefacción del gas natural implica ejercer una presión elevada sobre el gas o reducir su temperatura a niveles extremadamente bajos, normalmente en torno a -160 grados Celsius (-260 grados Fahrenheit).
Al condensar el gas natural en forma líquida, resulta más práctico para su transporte a larga distancia, especialmente a regiones donde la infraestructura de gasoductos es limitada o inexistente.
¿Cómo se produce el GNL?
La producción de GNL implica la construcción y explotación de instalaciones especializadas conocidas como plantas de licuefacción.
Estas plantas están diseñadas para gestionar el complejo proceso de enfriamiento y condensación del gas natural, que requiere el uso de materiales criogénicos y tecnologías avanzadas.
Las plantas de licuefacción utilizan aceros especiales, como aceros inoxidables austeníticos aptos para la criogenia, para soportar las temperaturas extremas. La construcción y el mantenimiento de estas plantas pueden ser financieramente exigentes debido a la necesidad de una infraestructura robusta y de estrictas medidas de seguridad.
Sin embargo, los beneficios económicos y la seguridad energética que proporciona el GNL lo convierten en un recurso valioso para los países que buscan diversificar sus fuentes de energía y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Beneficios del GNL
Al conocer a fondo el GNL, podremos evaluar mejor su papel en el panorama energético mundial y su potencial para contribuir a un futuro más sostenible.
- Almacenamiento y transporte eficaces: La licuefacción del gas natural permite transportarlo largas distancias cuando el transporte por gasoducto no es factible. El volumen de gas natural en estado líquido es unas 600 veces menor que en estado gaseoso, lo que facilita y hace más eficiente su transporte por todo el mundo[1][3].
- Menos emisiones de gases de efecto invernadero: El GNL produce un 40% menos de dióxido de carbono (CO2) que el carbón y un 30% menos que el petróleo, lo que lo convierte en el más limpio de los combustibles fósiles. No emite hollín, polvo ni partículas y produce cantidades insignificantes de dióxido de azufre, mercurio y otros compuestos considerados nocivos para la atmósfera terrestre[4].
- Suministro energético seguro: El GNL puede garantizar un suministro energético seguro al ofrecer la posibilidad de abastecerse en un mercado mundial. Actualmente, el gas natural se importa de lugares tan variados como Qatar, Argelia, Estados Unidos, Noruega, Australia y Trinidad. Esta elección significa que nos beneficiamos de la competencia de precios, que puede reducir los costes[4].
- Monetización del gas natural: Los países en desarrollo con abundantes recursos de gas natural están especialmente interesados en monetizar el gas natural exportándolo como GNL. Por el contrario, los países más desarrollados están interesados en importar GNL para complementar sus suministros de gas natural [2].
La licuefacción del gas natural es una forma de transportarlo largas distancias cuando el transporte por gasoducto no es factible. El crecimiento del mercado internacional de gas natural ha dado lugar al uso de gas natural en forma licuada, o GNL.
El GNL es gas natural enfriado a un estado líquido, a unos -260° Fahrenheit, para su transporte y almacenamiento. Este proceso permite transportar gas natural a lugares a los que no llegan los gasoductos.
El GNL se crea enfriando el gas natural y reduciendo su volumen, lo que hace más fácil, seguro y eficiente su transporte por todo el mundo. Una vez que el gas se ha transformado en líquido y se deposita en tanques de almacenamiento, se bombea a buques de transporte, que tienen diferentes destinos. El GNL ha ido aumentando su comercialización en los últimos años.
En su destino, se bombea al barco de descarga a los tanques de almacenamiento o directamente a las plantas de regasificación, que hacen exactamente lo contrario de la licuefacción, dar calor al gas licuado para que vuelva a su estado gaseoso.
En conclusión, como periódico favorable a la industria, creemos que el GNL es un recurso importante que puede aportar importantes beneficios económicos y medioambientales.
La licuefacción del gas natural permite transportarlo largas distancias cuando el transporte por gasoducto no es factible, y produce menos emisiones de gases de efecto invernadero que otros combustibles fósiles. El GNL puede garantizar un suministro energético seguro y ayudar a los países en desarrollo a monetizar sus recursos de gas natural.