Diario de minería, petróleo y campo.
El Gobierno nacional volvio a postergar por tercera vez en el año la actualización del impuesto sobre los combustibles líquidos. El aumento que debía comenzar a regir mañana, y la pasó para el 1 de octubre próximo.
La decisión fue adoptada a través de un decreto publicado este miércoles en el Boletín Oficial. El objetivo de la medida es «asegurar una necesaria estabilización y una adecuada evolución de los precios».
La decisión fue adoptada a través del decreto 561/2022 publicado hoy en el Boletín Oficial, con el objetivo de «asegurar una necesaria estabilización y una adecuada evolución de los precios».
“Tratándose de impuestos al consumo, y dado que la demanda de los combustibles líquidos es altamente inelástica, las variaciones en los impuestos se trasladan en forma prácticamente directa a los precios finales de los combustibles”, indicó el decreto.
Por eso subrayó que “en línea con las medidas instrumentadas hasta la fecha y con el fin de asegurar una necesaria estabilización y una adecuada evolución de los precios, resulta razonable postergar para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil los efectos de los aumentos en los montos de impuesto”.
El Impuesto a los Combustibles prevé actualizaciones en su suma fija en enero, abril, julio y octubre de cada año.
La norma recuerda que las actualizaciones para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil “se han diferido sucesivamente” en 2021.
Esta es la sexta postergación de aumento de la aplicación del impuesto que este año ya se prorrogó en febrero y en junio.
Con el decreto de hoy, se encuentran pendientes las actualizaciones correspondientes a los cuatro trimestres de 2021 –postergadas a fines de febrero al 1 de junio-, que ahora se aplicarían el 1 de octubre; y las del primero y segundo trimestre de este año que, de acuerdo también al decreto, quedaron para el 1 de enero de 2023.