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Sam Bankman-Fried, un activista y ecologista que financia al partido demócrata en Estados Unidos, es dueño y CEO de FTX una criptomoneda que recientemente cayó estrepitosamente dando a conocer una farsa camuflada de ecologismo y buenas intenciones.
Tras el colapso de la bolsa de criptomonedas FTX, parece que han desaparecido al menos 1.000 millones de dólares en activos de inversores, según múltiples informes.
Reuters informa de que, según dos fuentes anónimas que anteriormente trabajaban en FTX y que afirman haber estado al tanto de las finanzas de la empresa, a FTX le faltan al menos 1.000 millones de dólares en fondos de clientes.
Las fuentes afirmaron que los fondos formaban parte de los 10.000 millones de dólares en fondos de clientes que el fundador de FTX, Sam Bankman-Fried, supuestamente desvió a Alameda Research, el fondo de cobertura del que es propietario.
El Wall Street Journal informó posteriormente de que parecía que los hackers habían robado realmente 370 millones de dólares. Bankman-Fried dijo a Reuters que «no estaba de acuerdo con la caracterización» de la transferencia, y añadió: «Teníamos un etiquetado interno confuso y lo interpretamos mal«.
La respuesta de Bankman-Fried
Reuters preguntó a Bankman-Fried sobre los fondos desaparecidos de los clientes a través de un mensaje de texto, a lo que respondió «??».
El consejero general de FTX U.S., Ryne Miller, tuiteó el sábado que la compañía había detectado «transacciones no autorizadas» y trasladó todos los activos digitales al almacenamiento en frío, o fuera de línea.
Según la empresa de análisis y cumplimiento de criptomonedas Elliptic, el pasado viernes por la noche se robaron 473 millones de dólares en criptoactivos de FTX, aunque aún no se ha confirmado la cantidad exacta.
En un hilo de Twitter incoherente que intenta explicar el estado actual de FTX, el CEO y megadonante demócrata Sam Bankman-Fried escribió: «Lo siento. Eso es lo más importante. La he jodido y debería haberlo hecho mejor«.
Esta semana, Anthony Scaramucci, el fundador de SkyBridge Capital y notorio crítico de Trump, habría viajado a las Bahamas para ayudar a Bankman-Fried como amigo e inversor.
Scaramucci dijo que cuando llegó, la empresa parecía estar en serios problemas mucho más allá de un simple problema de liquidez. No notó ningún mal manejo cuando él y otros inversores evaluaron a FTX como un potencial socio comercial.
Scaramucci dijo en el programa Squawk Box de la CNBC el viernes por la mañana: «Engañado supongo que es la palabra correcta, pero estoy muy decepcionado porque me gusta Sam. No sé qué ha pasado porque no tenía información privilegiada sobre FTX«.