Diario de minería, petróleo y campo.
El Juzgado Federal N° 2 de Mar del Plata rechazó una cautelar presentada por la Fundación Greenpeace Argentina para que se suspendan las actividades de exploración offshore en aguas del Mar Argentino a la altura de la ciudad balnearia.
La organización ambientalista Greenpeace, alegaba que la exploración petrolera en el Mar Argentino podría tener un impacto negativo en el mar argentino, la biodiversidad y la salud humana. Sin embargo, el juez Santiago Marín consideró que no se había demostrado que la exploración offshore representara un riesgo inminente o irreparable.
No obstante, el magistrado requirió informes vinculados al Proyecto «Argerich-1» referido al proyecto de exploración sísmica frente a las costas de Mar del Plata originariamente cuestionado en el expediente presentado por Greenpeace.
En relación a los potenciales riesgos ambientales advertidos por Greenpeace, el juez hizo saber al Estado nacional que en los informes deberá «referirse especialmente al cumplimiento por parte de la Argentina del deber de información derivado del Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo, así como del Convenio de Cooperación sobre Preparación y Respuesta a Incidentes de Contaminación del Medio Marino por Hidrocarburos y Otras Sustancias Nocivas, respecto de la República Oriental del Uruguay».
En el informe de “Memoria de Gestión” de la cartera energética adelantó que, entre los meses de febrero y marzo de 2024, se llevará adelante “la perforación del pozo Argerich x-1 dentro del área CAN-100, que será el primer pozo exploratorio de aguas profundas”.
De hallarse hidrocarburos, se ingresaría en la siguiente etapa, que es la de establecer los límites del yacimiento con pozos diseñados para testear el fluido a producir. Es recién en una tercera etapa cuando se perforarían los pozos de producción.
Cabe destacar que el Clúster de Energía Mar del Plata estimó el hallazgo de petróleo convencional abriría la oportunidad de generar inversiones por 40.000 millones de dólares en componentes nacionales y la contratación de unos 125.000 trabajadores para el sector durante las próximas tres décadas.