Casi dos años después de que Tesla Inc. esbozara un plan para extraer litio, su jefe, Elon Musk, señaló que el gigante de los autos eléctricos podría comenzar a hacerlo, debido al costo vertiginoso de la clave metálica para la tecnología de baterías.
El litio se ha sumado a la agitación que afecta a las materias primas tras la guerra de Rusia contra Ucrania. Incluso antes de la guerra, los precios de las materias primas subieron con el aumento de la demanda y los suministros se ahogaron debido a los problemas de la cadena de suministro provocados por la pandemia.
Un índice de los precios mundiales del litio compilado por Benchmark Mineral Intelligence aumentó casi un 490% en el último año.
China se preocupa tanto por los precios del litio que reunió a una variedad de actores del mercado durante dos días de conversaciones centradas en detener un aumento vertiginoso de los precios.
El litio es un componente clave en las baterías de los vehículos eléctricos, por lo que los fabricantes de automóviles están compitiendo para asegurar los suministros, esperando un aumento en la demanda en medio de un impulso global para la electrificación del transporte.
Tesla ha firmado acuerdos de suministro con productores de metales para baterías en los últimos dos años, incluido uno secreto con el gigante minero Vale SA.
A raíz del repunte de los precios del litio, China ya le está diciendo a su cadena de suministro de baterías para vehículos eléctricos que quiere que los precios del litio vuelvan a niveles sostenibles, ya que los precios altísimos han aumentado la inflación de costos para los fabricantes y amenazan con dañar la demanda de los consumidores.
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