Salta fue la única provincia donde no se retrajo el empleo en la construcción durante enero, según los últimos datos del sector. La particularidad, en un contexto de crisis económica y paralización de la obra pública, tiene una sola explicación: la minería.
Si bien la actividad minera en la Puna salteña sostenía la construcción en el arranque del año, desde el gremio de la Uocra (Unión Obrera de la Construcción de Argentina) advertían ya por ese entonces que iban a haber menos trabajadores por la falta de inversiones en obra pública. De hecho, prácticamente todos los proyectos que dependen del Estado, tanto nacional, provincial y municipales, fueron suspendidos.
Desde el sindicato de los albañiles señalaron que se perdieron entre 6.000 y 8.000 puestos de ese ámbito.
Fue la única provincia durante enero que mantuvo los niveles de empleo en el sector. Hay alerta por la suspensión de la obra pública, sumado a la caída de proyectos privados fuera de la Puna.
De acuerdo a un reciente informe del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), Salta fue la excepción del país en enero con un crecimiento del empleo en las obras de un 1% con respecto a diciembre. En el resto de las jurisdicciones hubo caídas laborales, con un promedio nacional del 5,6% en la medición de mes a mes.
En la comparación interanual, Salta encabezó el índice de creación de trabajo en la construcción, con un suba del 8,1% durante el primer mes de 2024, cuando se registraron 12.384 empleos formales en el sector.
Sólo otras dos provincias tuvieron una mejora en el empleo en las obras durante enero: Neuquén, con un crecimiento del 7,5%, y La Pampa, con una suba interanual del 2,6%.
La construcción salteña también se destacó en cuanto a la cantidad de empresas activas en el rubro. Según el Ieric, en febrero había 448 constructoras y subcontratistas en la provincia. Fueron 41 más que en igual mes de 2023, lo que significó un crecimiento del 9,2%, el mayor del país, seguida por Neuquén, con un incremento interanual del 4,3% (27 empresas más).
El aporte de la minería está dado principalmente por la construcción de cuatro plantas de litio en el departamento de Los Andes, sumado a las edificaciones que se realizan en proyectos mineros en otras etapas previas a la producción.
Indicios
La señal de alerta, más allá de la suspensión de la obra pública, también se encuentra en las edificaciones que se proyectan a futuro. Esa situación se puede observar a través de la superficie que se habilitó para construir. El Ieric, con datos del Indec, señaló que entre enero y noviembre del año pasado, la superficie permisada en Salta cayó un 22,6%, en comparación a los mismos 11 meses de 2022.
También afecta a la obra privada la inflación, el costo de edificación de un metro cuadrado para una vivienda estándar en Salta costaba alrededor de $583 mil en enero pasado, según el Consejo Profesional de Agrimensores, Ingenieros y Profesiones Afines (Copaipa), un 257% más que un año atrás.
Frenados
Entre las obras públicas que se paralizaron en Salta por falta de fondos, hay varias que ya tenían algún avance físico, pero se frenaron porque no se depositaron lo correspondiente a las certificaciones de obra. Esa deuda nacional asciende, según señalaron en el Gobierno provincial, a casi $10.000 millones.
En ese paquete hay obras iniciadas sobre rutas, viviendas sociales, inversiones en el dique Limón en San Martín, también en la Ciudad Judicial de Orán y en la construcción de Centros de Desarrollo Infantil (CDI). Además incluye cinco proyectos para llevar servicios a asentamientos incluidos en lo que era el Renabap (Registro Nacional de Barrios Populares), para transformarlos formalmente en «barrios».
Registro de la crisis a nivel nacional
El empleo registrado a nivel nacional en la industria de la construcción volvió a disminuir en enero por quinto mes consecutivo y alcanzó un total de 372.311 puestos de trabajo. Con una baja del 5,6% mensual, registró la mayor caída de la serie histórica para un mes de enero. Esta tasa de variación mensual negativa más que cuadruplica la media histórica para el primer mes de un año. Asimismo, el volumen de ocupación sectorial marcó por segundo mes consecutivo una caída superior a los 20.000 trabajadores registrados, alcanzando una pérdida de algo más de 72.000 puestos de trabajo desde agosto del año pasado. Los registros del Ieric indican que en febrero se registraron 21.150 empleadores en actividad.